viernes, 10 de junio de 2016

1617* Ya que sos tan consecuente, llegate hasta el cafetín, deschavalo al batistín pa' que lo june el ambiente (JoséPagano)

Número 1617 | vier 10 jun 2016 | Año XI

      LA VERDAD SECUESTRADA


por Samuel Blixen

del sitio del PVP 20/5/16



( NdeR: reproducimos esta nota que permiten comentarios del compa Pirincho)
En vísperas de la 21ª Marcha del Silencio, un balance de la lucha por la verdad y la justicia exhibe contradicciones, renuncias, omisiones y mezquindades de quienes desde hace 30 años levantan las banderas.

Dentro de 14 días, el 27 de mayo, el coronel retirado Manuel Cordero se sentará en la sala de audiencias de los tribunales de Comodoro Py, en Buenos Aires, para escuchar la sentencia definitiva del juicio sobre el Plan Cóndor que instruye el Tribunal Oral en lo Criminal Federal número 1 de la Ciudad de Buenos Aires. Será castigado por su responsabilidad en la desaparición de diez prisioneros y en torturas infligidas a otros 36 exiliados secuestrados en Automotores Orletti, el centro clandestino de detención que operó como base de los grupos Cóndor. 
La sentencia será una verdadera condena a cadena perpetua.
Cordero, de 77 años, debería haber respondido en Uruguay por numerosos delitos de lesa humanidad, entre ellos la desaparición de personas, asesinatos, torturas, chantajes y violaciones. Pero en 2004, cuando lo citaron a un juzgado penal para responder por unas declaraciones ofensivas contra magistrados, prefirió huir del país antes que pisar un juzgado. Cruzó la frontera y se instaló en Santana do Livramento, porque ningún juez procedió a ordenar el cierre de fronteras. 

Pese a estar prófugo, cobró religiosamente su jubilación en la dependencia del BROU en Rivera hasta que en 2007 fue detenido por orden de la justicia brasileña; también obtuvo dos préstamos sociales en el Banco República, que cobró su hija, uno de los cuales utilizó en Buenos Aires, después de que fuera extraditado en 2010 a pedido de un juez argent ino, para procesarlo en la causa del Cóndor. Los jueces uruguayos demoraron tanto el pedido de extradición que los argentinos les ganaron de mano.

El caso Cordero es paradigmático, ejemplifica uno de los costados del perverso proceso que invariablemente desemboca en la frustración cuando se trata de descubrir la verdad e imponer la justicia en los delitos de lesa humanidad, y de reparar a la sociedad por el lastre de la impunidad que condiciona y bastardea el futuro. La democracia no debería ufanarse demasiado por lo hecho en materia de derechos humanos: desde 1985 hasta ahora sólo 28 militares y policías fueron procesados, y algunos condenados, de una lista que se aproxima a los 400 denunciados. 
 De un total de 187 desaparecidos (una cifra que fluctúa según la fuente), en estos 31 años se han rescatado en Uruguay cuatro restos, ¡cuatro! Dirán que es imposible ubicar los cementerios clandestinos si los militares no aportan la información. Y le darán la razón al ministro de Defensa, quien reclamaba autorización p ara torturar, porque de otra manera, decía, no se obtendrían los datos.

Falso: que se sepa, en Argentina y en Chile los investigadores no torturaron y sin embargo los resultados de las investigaciones son sorprendentes, en materia de ubicación de restos y de responsables castigados. Es posible saber la verdad, actuar con decisión en el “nunca más” y escribir la verdadera historia. Pero se requiere que los poderes del Estado, los políticos, los funcionarios, los jueces, los investigadores, actúen de verdad.

En Uruguay el Estado sigue siendo el principal encubridor. Un Parlamento democráticamente elegido aprobó por mayoría (y en función de la “lógica de los hechos”, léase la presión militar) la ley de caducidad; una Suprema Corte convalidó por mayoría la constitucionalidad del engendro; y un presidente colorado archivó todas las denuncias judiciales asestando un serio golpe a la independencia judicial, que desde entonces, y en la mayoría de los casos, pispea las señales sobre el humor político antes de actuar. 

Ese presidente negó enfáticamente que en Uruguay hubiera niños robados por militares, y a los tres meses apareció Macarena. Un presidente blanco pactó con los militares otro capítulo de impunidad aceptando groseras fábulas que dejaron sin castigo a los responsables de la desaparición y asesinato del chil eno Eugenio Berríos, que reiteró otra “lógica de los hechos” para un Cóndor en democracia. Otro presidente colorado inventó la Comisión para la Paz; sus responsables hablaron con militares y aceptaron como cierta la versión de que los cuerpos de los desaparecidos fueron exhumados de los cementerios clandestinos, cremados y sus cenizas dispersadas en el mar. Muy poco después se desenterraban los restos de Fernando Miranda en el predio del 13 de Infantería. Se dijo que esa era la excepción que confirmaba la regla: hubo otras tres excepciones.

El aporte frenteamplista a una política diferente permitió desarchivar las denuncias judiciales pero fue incapaz de involucrarse en la investigación de los crímenes; las estructuras estatales no hicieron nada para obtener pruebas que alimentaran las causas judiciales; una parte importante de la burocracia frenteamplista no estaba verdaderamente comprometida en la lucha contra la impunidad y anticipaba en los hechos la propuesta de que la biología resolviera el problema. En esa política dual y gatopardista hubo expresiones en uno y otro sentido: hubo diputados y senadores que a último momento restaban su voto para eliminar la ley de caducidad; y hubo alguna ministra, ubicada en la cúspide del poder militar, que actuó con determinación cuando recibió el dato y logró ubicar uno de los archivos que la estructura uniformada mantiene ocultos. El poder político f ue capaz de instrumentar un acuerdo con la Universidad para una investigación arqueológica y otra investigación histórica, pero al mismo tiempo impuso una cláusula de rigurosa confidencialidad, que va en contra de la esencia universitaria.
 Las excavaciones se iniciaron bajo un clima de esperanza (para los familiares que aún no concluyeron el duelo de sus desaparecidos y para la sociedad toda), pero nada se hizo cuando los militares amedrentaban a los antropólogos, filmaban todos sus movimientos, movían de lugar las señales de trabajo e impedían la acción de algunos jueces. Nadie tomó medidas ejemplares, y esa subimpunidad alimentó la reciente incursión de “desconocidos” en el laboratorio del Grupo de Investigación en Arqueología Forense (GIAF).

La iniciativa presidencial de solicitar a los mandos militares información sobre los restos de los desaparecidos, en un plano de confidencialidad, terminó en una burla que indujo al presidente a señalar el lugar específico donde supuestamente debían estar, con un 99 por ciento de certeza, los restos de la argentina María Claudia García de Gelman, un caso particularmente sensible porque su traslado clandestino desde Buenos Aires, su desaparición y su asesinato obedecieron al propósito de atender su parto a los solos efectos de robarle su bebé, destinado a ser entregado a un jerarca policial. Se impuso el 1 por ciento restante.

La difícil tarea de ubicación de enterramientos clandestinos tuvo su contraparte en las gestiones secretas de un secretario de la Presidencia que se reunió con el cogollo de los criminales de la dictadura para ofrecerles, a cambio de “unos huesitos”, una salida “política” para evitar su encarcelamiento. La fórmula propuesta por el negociador consistía en imponer el criterio de que los crímenes habían prescrito judicialmente, y es la misma que invariablemente impulsan los abogados de los criminales y en ocasiones es refrendada por algún tribunal de alzada y la Suprema Corte de Justicia. 

Esa negociación infructuosa, que buscaba un atajo para resolver el “problema de los derechos humanos”, dejó de ser secreta cuando los interlocutores uniformados difundieron las grabaciones de esas conversaciones. La Presidencia negó tibiamente la oferta de un cambio de huesitos p or información, y no hubo ninguna sanción para el alto funcionario que las llevó adelante; la oposición, que reclama a diestra y siniestra la destitución de ministros, no se dio por enterada en este caso.

Un costado particularmente irritante de la postura del gobierno es lo que podría llamarse el “financiamiento de la omertà”: de los 20 militares encarcelados (aunque algunos gozan de prisión domiciliaria) sólo dos están en situación de reforma: José Arab y Gilberto Vázquez, y por tanto sus familiares cobran apenas una parte de su jubilación. Están en situación de reforma por episodios de indisciplina: los graves crímenes por los que fueron procesados éstos y los otros 18 militares no merecieron tribunales de honor; el honor militar no se resintió por los asesinatos, torturas y violaciones a prisioneras, y por lo tanto cobran la totalidad de su jubilación

 El reclamo de instalar tribunales de honor para juzgar la conducta criminal cayó en oídos sordos. Y lo mismo ocurre con los militares que están fugados o procesados en el exterior, con el agravante de que, además de la jubilación, los tres oficiales procesados en Chile por el asesinato de Berríos, y Cordero en Argentina, están asistidos en sus defensas con financiación del Estado uruguayo

 Un caso particularmente paradójico es el del capitán de navío Jorge TRÓCCOLI, sometido a juicio en Italia: el Estado le paga su jubilación y a la vez le paga al abogado italiano que procura su condena; no se sabe si, además, el Estado uruguayo paga los servicios del abogado que lo defiende.

El caso de TRÓCCOLI enhebra y acumula las más flagrantes contradicciones. Puesto en evidencia por sus compañeros estudiantes de Humanidades, que reconocieron en aquel “viejo” que estudiaba antropología al torturador de Fusileros Navales (FUSNA), el capitán de navío retirado no tuvo mejor idea que escribir un libro justificando su pasado de torturador; intentó reducir su responsabilidad con el mismo argumento que el coronel Asencio Lucero, para quien la picana es un cosquilleo y la desnudez de las prisioneras un recurso para explotar el pudor a favor de la confesión.

La confesión impresa de TRÓCCOLI no tuvo su contraparte en una fulminante acción judicial, de modo que para cuando las víctimas formalizaron la denuncia, el capitán de navío optó por abandonar el país con un pasaporte italiano. Fue detenido en Salerno en 1995, cuando se inició un pedido de extradición, pero al embajador uruguayo en Italia se le pasó por alto un trámite formal que desbarató la extradición y permitió que TRÓCCOLI viviera desde entonces en libertad. 
En una causa por las desapariciones de italianos en el marco del Plan Cóndor, terminó siendo enjuiciado y su juicio se despliega actualmente en Roma. 
De hecho, TRÓCCOLI había sido identificado como torturador por el ex marino Daniel Rey Piuma en su libro Un marino acusa, pero los elementos aportados no fueron suficientes para poner en marcha los engranajes de la jus ticia. Entre la exposición pública de TRÓCCOLI y su fuga a Italia medió un lapso que permitió su identificación como represor en Argentina de ciudadanos uruguayos exiliados pertenecientes a los Grupos de Acción Unificadora (GAU), que eran blanco de la inteligencia naval. Lo que ahora asombra es la revelación de que, en ese limbo que vivió TRÓCCOLI antes de su fuga, el capitán de navío fue entrevistado en más de una oportunidad, en forma reservada, por una militante de los GAU que asumió protagonismo en su carácter de miembro de la organización Madres y Familiares de Desaparecidos.( NdeR nosotros lo decimos MARITA MARTÍNEZ*) 

Hoy se sabe que TRÓCCOLI es responsable directo de la desaparición en Buenos Aires de varios militantes del GAU, y uno de los impulsores de una experiencia de inteligencia en el FUSNA que, copiando a los represores de la ESMA argentina, instaló lo que se llamó “La Computadora”, donde prisioneros de Fusileros Navales aceptaron realizar tareas de análisis de las declaraciones arrancadas bajo tortura a otros prisioneros, para evaluar la veracidad y la utilidad de las confesiones. 
 El reclutamiento para La Computadora requería un análisis previo de las características psicológicas del colaborador y un conocimiento de éste sobre la realidad interna de su organización.

En La Computadora trabajaron comunistas, GAU y tupamaros, que analizaron, incluso, los interrogatorios a que fueron sometidos desaparecidos apresados en Argentina. Un detallado informe sobre La Computadora, elaborado por oficiales de inteligencia del FUSNA, fue entregado en 2005, junto con otros documentos, a la Presidencia por el comandante de la Armada; pero ese documento, calificado como confidencial, no llegó a ningún juzgado, aunque un ministro de Defensa se lo entregó a la militante de los GAU que integra Familiares; el documento quedó “archivado” durante años. Puede ser penoso hablar de estos vericuetos, pero son parte de la historia que debe conocerse para tener una explicación de por qué la lucha por la verdad enfrenta tantos obstáculos.


OBEDIENCIA DEBIDA. 

Entre las dificultades para descubrir la verdad, el silencio de los militares acapara un porcentaje alto de responsabilidad. Pero también tienen su cuota las mezquindades, los celos, los cálculos políticos y los oportunismos, a todos los niveles: políticos, judiciales, sociales y académicos.
 La mayoría de los jueces penales han estado omisos o toman decisiones para engañar el ojo: por ejemplo, al reiterar procesamientos contra las figuritas conocidas (como Gavazzo), pero eludiendo actuar contra otros denunciados, tanto militares como civiles; tal es el caso del director del Hospital Militar en 1973, y los médicos que “atendieron” a Luis Roberto Luzardo, a quien una bala lo dejó cuadripléjico y que murió después de meses de sufrir hambre y permanecer postrado en una cama sin que fuera higienizado, lo que derivó en la multiplicación de e scaras.

Cuando un juez penal procesó por homicidio a Ricardo Zabala, el policía que secuestró al maestro Julio Castro, un tribunal de apelaciones revirtió el fallo aduciendo, nada menos, que “obediencia debida”; la Suprema Corte convalidó la libertad de Zabala. Cuando una jueza está a punto de procesar al general Pedro Barneix por el homicidio de Aldo Perrini, la Suprema Corte no encuentra otra solución que trasladar a la jueza sin explicar los motivos, con lo que, de hecho, detiene la acción judicial en numerosos expedientes.

Simultáneamente era de esperarse que la incautación de un archivo militar en el local de la Escuela de Inteligencia, una dependencia de la Dirección General de Inteligencia del Estado, alimentara con información nueva los procesos judiciales en curso y otros que, por diferentes razones, están detenidos. 
La incautación llevó en 2006 a la entonces ministra de Defensa a impulsar un contrato de obra para escanear los rollos de microfilmes guardados en un armario de la citada escuela. Después de dos años de trabajo, los dos contratados entregaron en 2009, al nuevo ministro de Defensa, los 1.144 rollos de microfilmes y los 51 Dvd con las 3 millones de imágenes que conforman el respaldo digitalizado.
 En el informe entregado al ministro se especificaba que cinco rollos referidos a documentos elaborados por informantes y uno referido a los colaboradores durante la dictadura estaban lacrados por orden de responsables de inteligencia, entre ellos el general Barneix. 
El informe sugería la preservación adecuada de los rollos (considerados como los originales, en el supuesto de que los papeles habían sido destruidos) y la dispersión del material digitalizado a fin de asegurar su existencia. También se sugería que el trabajo de ordenamiento y análisis de los documentos requería por un lado mayor cantidad de contratados (el volumen es comparable a una biblioteca de 12 mil libros de 250 páginas cada uno), y por otro la utilización de un buscador digital para hacer el cruzamiento de datos que permitiría establecer el verdadero valor de la documentación incautada; también se sugería que el escáner se mantuviera conectado a las computadoras utilizadas, a efectos de realizar digitalizaciones de imágenes ilegibles.

El ministro no sólo no dispuso entregar el buscador digital, sino que desarticuló el soporte técnico, y no renovó el contrato. No se sabe si aceptó la sugerencia de dispersar el material escaneado; se sabe sí, que los 51 Dvd fueron entregados al Archivo General de la Nación, pero sólo 16 fueron aportados al coordinador general del equipo de investigación histórica de la Facultad de Humanidades, en lo que sería la columna vertebral de la elaboración de los cinco tomos publicados en la web de Presidencia, y cuya última actualización está fechada en 2015. Los 16 Dvd se sumaron a los materiales obtenidos en otros cinco archivos, en particular el de inteligencia policial y el de la cancillería, pero se desconoce si el equipo de historiadores accedió al contenido del resto de los discos. 

Algunos de los rollos lacrados por el general Barneix dan cuenta de la in tensa tarea de espionaje desplegada entre 1985 y 2003 y la capacidad de la inteligencia militar para ubicar infiltrados en el entorno de Wilson Ferreira Aldunate y Carlos Julio Pereira, y del MLN-MPP.

El trabajo del equipo de historiadores se centró en la “sistematización de la voluminosa documentación seleccionada”, pero eludió explícitamente la labor de análisis de inteligencia del material, a efectos de producir insumos para la justicia; entre otras cosas, se descartó el uso de un buscador digital. La cláusula de confidencialidad pretextó el negar documentación a familiares de las víctimas del terrorismo de Estado, y el monopolio de la información –se sostuvo– sólo se doblegaría ante una orden judicial. 
Quizás ahora, con la firma de otro convenio entre la Universidad y la Presidencia, que excluye la cláusula de confidencialidad, será posible acceder a la documentación en un régimen de transparencia, lógicamente acotado a ciertas normas. Pero eso siempre y cuando se establezca dónde está la totalida d del material incautado.

Por cierto, los criterios razonables para el manejo de la información no aparecen claros en los volúmenes publicados por la Presidencia y el equipo de historiadores. A lo largo del texto (ordenado en un estilo más que barroco, churrigueresco, casi iniciático) se pueden detectar diferentes criterios de manejo de la información, siempre contradictorios entre sí. En algunos casos, particularmente en los textos y la elección de los documentos referidos al Partido Comunista, hay una elección determinada de evitar la inclusión de nombres y modificar el original apelando a las iníciales de los apellidos, lo que expresaría un criterio compartible. Pero en otros casos, en textos relacionados con el MLN, el PCR y el PVP, el historiador no tuvo empacho en exponer los nombres completos, de modo que no queda claro cuál fue el criterio utilizado, o la razón de utilizar dos criterios antagónicos.
 Lo mismo con la transcripción de documentos. En algunos casos se incurre en la reproducción total de actas de interrogatorios que exponen al torturado, y que en general se refieren a desaparecidos del MLN y los GAU; no ocurre lo mismo en otros casos, donde la documentación sufrió una benévola censura. El resultado final parece apuntar a la elaboración de una verdad oficial. 

Quien se tome el trabajo de bucear en la obra podrá alimentar sospechas de un tratamiento desigual para situaciones iguales, donde despuntan algunos criterios de política mezquina que enturbian la búsqueda de la verdad.

Es en este contexto que una porción importante de la sociedad civil, tozuda y empecinada, encara la 21ª Marcha del Silencio, el próximo miércoles 20.



TOMADO DE Brecha No.1590 del 13 de mayo 2016 (páginas 6 y 7)
 

Marita Martínez 

(María del Carmen Martínez*)


Es una de las tantas que en su "trabajo" en DDHH se arroga el derecho de clasificar y reclasificar los archivos y también con su brutal arrogancia a opinar sobre los testimonios  siendo en este caso el atrevimiento mayor de sustituir a la Justicia. A los archivos los tachan y retachan con un criterio total  de  IMPUNIDAD,  arrogándose  la potestad sobre lo que consideran  comprometedor para los torturadores sin consultar a  los presos políticos nombrados en ese material que en definitiva deben ser quienes deciden si dan o no a conocer el archivo 

Peor aun cuando "manosean" los testimonios  ya que por regla general durante años  poseen las muletillas de afirmar con total atrevimiento que ·el titular de ese informe está enfermo psiquiátrico o directamente te dicen esta “loco", esta desvariando.. ,  así como: “otro que  es esta mal se confunde de preso"  o sino “está mal se confunde de fechas", “está mal por esto y esta mas por aquello"  Llegando  al desparpajo máximo, porque nos consta :
 descalificando testimonios  directamente a los periodistas!!!
Blixen debería dar su nombre, sin más vueltas ( bueno vemos como el Bolita algunas cosas calla de la historieta oficial ) pero nosotros lo damos de este personaje siniestro que paso por ORLETTI haciendo un pacto con GAVAZZO ( Gavazzo siempre sostenía que a las mujeres las dominaba ) el pacto fue ocultar la muerte de su compañero y salir libre Hoy está casada con un policía
Ella ha negado también entrega de archivos que son clave en los juicios como en Italia y Juzgados Nacionales Argentinos etc. . 
Claramente  hoy por hoy con este ocultamiento de archivos favorece abiertamente a Jorge Néstor TRÓCCOLI, residente en Italia desde 2007 etc. , en el marco de las audiencias del operativo Cóndor que se llevan en Italia También  al ser descubierta esta señora "TOPO" infiltrada y quizás a sueldo¿? pidió disculpas...  tarde piaste ya que un joven le robo uno de esos archivos ( no tenía otra salida) y sin avisarle por supuesto lo presenta en Italia eso mismo sucedió con TESTIMONIOS contra el Goyo Álvarez que acusaron a presos políticos que testimoniaban de "locos" que desvariaban y luego se defendían diciendo " no lo que pasa es que ese informe lo reservábamos para el año que viene” CUANDO TODOS SABEMOS QUE ES LO QUE VIENE Y  EN QUE TRABAJAN TODOS ESTOS INFILTRADOS ( ver lo que paso en Humanidades)  seguir con  estos es e mantener la impunidad!!

Marita era en junio de 1976 la compañera de José Hugo MÉNDEZ DONADÍO, el Negro Hugo, obrero textil uruguayo detenido en la Estación de Villa Ballester el 15/6/76 cuando tomaba el tren para dirigirse a su trabajo en la fábrica textil  de ahí es llevado a su domicilio que es invadido por 15 hombres de particular, muchos de ellos calzando botas del ejército, armados con metralletas, revólveres y escopetas. 
En la casa revisaron y desordenaron todo buscando armas. Solamente encontraron material escrito con información sindical. Robaron todo lo que consideraron de algún valor, entre ellos los colchones y los abrigos de cama. En la calle había un camión del Ejército y un vehículo de particular donde llevaron detenidos a  Hugo y a María del Carmen Martínez, compañera de Hugo Méndez. Por testimonios de la propia M artinez  ante la CONADEP, son trasladados a Automotores Orletti, donde son salvajemente torturados, y de ahí entre el 20 o 21 de junio  Hugo Méndez, junto a Francisco Candia, militante comunista, obrero textil exiliado en Buenos Aires, son encontrados muertos por la policía  en la calle  a unas 10 cuadras de Orletti, en Argerich y Morón

 Según el testimonio de María del Carmen Martínez ante la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (CONADEP) (30.01.1984):

En el plazo de esa semana, mientras estuve detenida(del 15 al 20 de junio) los interrogatorios y torturas estuvieron dirigidos sobre Hugo y Ruben Candia.Esto lo hacían en una pieza del piso superior al nuestro, por lo tanto cualquiera de los que estábamos allí podemos testimoniar el hecho. El día 20, un domingo, después de interminables horas de tortura, Candia por lo que se oía, estaba acabado y pasaba largos ratos desmayado, mientras que a Hugo le rompían los nudillos de los dedos de las manos, por lo que interpreté en aquellos momentos. Después de todo esto, un camión que salió del lugar parti&oa cute; con ellos dos, volviendo un rato después (no puedo decir si pasaron cinco minutos oveinte) sin ellos.

El Negro Hugo  fue obrero textil en la fábrica Alpargatas (en Uruguay) y encargado del control de calidad en la textil Perle (en Argentina). Había tenido militancia  en  el Grupos de Acción Unificadora (GAU), Frente Amplio (FA). Dirigente del Congreso Obrero de Alpargatas (COA) y del Congreso Obrero Textil (COT), Integrante del Secretariado de la Convención Nacional de Trabajadores (CNT) en la clandestinidad (1973-1974)




PIRINCHO
postaporteñ@ 1617 - 2016-06-10 







      Nadie quiere el Estandarte,..

Si es larga la Procesión
o Tercera para Héctor Amodio Pérez


HAY DIFERENTES MONTONES
Unos grandes y otros…chicos
SI VA PAL MONTÓN DEL RICO…
El Pobre que….piensa poco
DETRÁS DE LOS EQUÍVOCOS
Se vienen los perjudico    
             
Don Atahualpa Yupanqui


En su segunda intervención Héctor Amodio Pérez (HAP de ahora en adelante) se mantiene en las líneas generales de su primera intervención (ver Posta 1611), cuando nos interrogaba a mí, pero también a otro compañero: Indignarse esta bien, pero para qué?

Sobre el tema de los motivos hay dos posiciones posibles: indignarse o no. Los que nos indignamos lo decimos francamente, en cuanto al para qué? lo hemos respondido anteriormente: nos bajamos de la “orga”, (el denominado “goteo”) que lo dejó –al final- al sellito MLN-Marenales con solo 300 militantes y al MPP &ndashndash;el nuevo engendrito- la multitudinaria base militante de decenas de miles de votantes. Todo eso son: realidades políticas.

Podrán gustarnos o no. Pero allí están y además fueron gobierno y actualmente son parte del gobierno, el famoso “cañón” que tan preocupado tiene al diario El País y al Observador.

La oposición burguesa y todos sus amanuenses la tienen fácil: estuvieron siempre en contra. Desde los más prominentes: el “Cejas napolitano” de Sanguinetti, al Sr. Alfonso Lessa que escribió todo un libro acerca de “La revolución imposible”.

Sobre el tema nos hemos extendido en nuestra primera intervención. Así que no es necesario abundar. Insistamos sobre lo básico, sin embargo, las clases existen y la burguesía –aún la raquítica y miserable burguesía uruguaya- también. Cuando estábamos en cana –sobre algunas cuestiones- estábamos re-claros: los milicos eran todos nuestros enemigos, pero había algunos milicos que la jugaban “de piola”, los denominábamos: “los soretes-piolas”.
Estábamos –lo sigo pensando- re-claros.

La “verdad objetiva”, cara a los marxistas, hoy día está en contrapunto con “la verdad relativa” de los neoliberales. Le sigue el resto de la milonga: la lucha de clases “no existe”, lo que existen son “problemas”, y su corolario final (del Sr. Fukuyama): hemos llegado “al fin de la historia”.

¿Es necesario insistir que no estamos de acuerdo?

Tampoco estamos de acuerdo que las diferencias históricas son, simplemente, “relatos”.

Dicho todo esto (y de un tirón),  vayamos a lo nuestro. Es posible que el “zapallo” de Gabriel Pereyra sea un tipo piola…con Héctor Amodio Pérez, para mí es un amanuense burgués que sabe no sacar los pies de la palangana, y a través de esa proeza, avanza en la personal. Y lo mismo digo del Sr. Álvaro Garcé. Y exactamente lo mismo pienso del Sr. Hebert Gatto que también escribió otro librito: 
“El cielo por asalto”….con prólogo ni más ni menos que del lamentable “kantiano” en que se transformó “el Turco” Amir y que después enfiló (y terminó) como asesor del Partido Colorado. Y lo mismo digo de otro “renunciante” el “Negro” Mancilla y su seguidor “el bazuka” Alemañy (que en mis tiempos era simplemente “el ch ino” Alemañy) y…que terminaron todos ellos, “blancos, como hueso de bagual”. Con todos estos “renunciamientos”, en su momento, la burguesía se frotaba las manos de contento. Después, para su consternación, vino la crisis del 2002 y para completarla, el 2004, que fue “el acabose”.

Yo de eso, no me hago cargo, porque no fui yo el que los relevó y les dio el reclute. Como que no me hago cargo de varias “cositas más” de la “interna”. Que cada cual cargue,… con su propia mochila.

No me hago cargo, tampoco, de las diferencias políticas que corrían, al seno del “coso-coso” como denominaban “los gambusas” al Comité Central en Punta Carretas. No creo,siquiera, que la mayoría de los militantes fugados en el “Abuso” las conocieran a cabalidad. Y,-ni hablar- de sus implicaciones. Todos esos eran “secretos”, de “los jefes”  y, bien arriba, aprovechando la muletilla de “la compartimentación”.

Todo eso, surge ahora, después del 2013.

La “historia oficial” se asentaba en una versión sencilla: un dirigente (HAP), detenido, se quiebra ante el enemigo y a partir del quiebre pasa a colaborar. De esa manera se convierte en “un traidor”.

La nueva versión con HAP, es un poco más compleja: había diferencias que se remontaban lejos en el tiempo, pero que se agudizan a partir de la caída de Almería y ciertas “responsabilidades” por la misma. 

Algunos no querían calzar el estandarte, porque sabían que la procesión sería larga. Pero en cana, todas las “vacas sagradas” hacen de tripas corazón, se reparten las “responsabilidades” (es el punto más flojo de la “historia oficial” ya que si ya tenían “sospechas” sobre Amodio, porqué le daban intervención en el pase de “la correspondencia” para afuera y, después, intervención en la planificación de la fuga?).

Otro aspecto –concomitante y crucial- tiene que ver con los planes futuros (ahí entran las elucubraciones militaristas de EFH. con el Hipólito y con el Hipopótamo, que se combinan con los planes de Sendic: el Tatú). La vieja dirección estaba en cana, pero “colaboraba” en materia de planes con la dirección que estaba afuera. Ellos tenían tiempo, los otros no, tenían que hacer y resolver cosas.

Rápidamente, lo que comenzó como una “colaboración” se canalizó “a opinar” sobre todo lo que se hacia afuera y, además, a “exigir”. “Esto estuvo mal, aquello también y, además, deben extremar los esfuerzos para “sacarnos” a nosotros”.

Al mismo tiempo y para afuera, los “dirigentes” o alguno de ellos, tenían líneas de comunicación particulares: Sendic a su gente, bajo la firma “Pico y Pala” y con Nelson Berreta como eje en la dirección de afuera. Todos estos verdaderos “quibebes” a la “interna”, (duplicación de comunicaciones incluidas), son la manifestación de diferencias notables, que ya se estaban acercando al punto de ruptura política franca.

Las “bases” -de esas “tormentas”- no tenían sino barruntos, ni se imaginaban el calado y la profundidad de ciertas diferencias.

¿Cómo llegamos a esa situación? –Yo creo que llegamos a eso, desde que se afirmó la línea del “aparato mínimo”(lejanos tiempos del Coordinador, que llevaron al MLN- Tupamaros primigenio) que fue el primer pasito que –internamente- se dio, para que la “dirección” cortara vínculos con sus bases y las empezara a sustituir. El segundo pasito se dio (en 1967) cuando se prohibieron las críticas internas en ocasión de una crisis memorable, pero que se remontó.

Así, el aparato mínimo se transformó en “aparato” lisa y llanamente y, en su dinámica se tragó a varios, incluidos en ellos, varios de sus creadores.
¿ A quién se comió? importa ahora -2016- poco, todos fueron víctimas del engendrito.
 O mejor dicho, fuimos. Por eso llegamos a la derrota del 72.
Volvamos ahora, a nuestra correspondencia pública, nosotros particularmente, a nuestra segunda intervención que cerrábamos con un resumen. 
Decíamos entonces, luego de la misma y, al cierre, que HAP no era un factor exterior al viejo problema de los 60 y 70. Y utilizábamos la figura de una ecuación, con sus variables o incógnitas. HAP nos responde que nunca fue bueno en matemáticas. 
Y lo mismo podemos contestarle nosotros, pero le agregamos que como las matemáticas eran una carencia en nuestra formación, en el exilio, nos dedicamos a tomar curso de las mismas, para suplir ese vacío. Y de yapa, descubrimos no solamente que las matemáticas son interesantísimas, descubrimos además, que tiene aplicaciones utilísimas en la vida de todos los días.
Pero vamos a lo nuestro. 
No ser un factor exterior, significa, implicaría, reconocer, que no siempre se tuvo razón.

Paso que parecería HAP no está dispuesto a dar. Lo cual nos apena, pero…cada cual con su cada cuala.

Nosotros hemos basado nuestras intervenciones, en el análisis de lo que consideramos esos errores, para intentar explicarnos la formidable derrota del año 72. Y con los elementos al día, es decir: libros, memorias, artículos, reportajes, conversaciones y testimonios hacemos nuestro balance.
HAP, ha basado sus intervenciones –particularmente desde el 2013, que es cuando “reaparece- en el análisis de las contradicciones de algunos que considera falsificadores y difamadores. 
Pero HAP también reconoce que colaboró con el enemigo, lo cual -él bien sabe- es una cuestión  grave.

Por esos mismos deslices, en tiempos que HAP era un dirigente, a varios se les dio “la baja deshonrosa” y, a alguno, en la “fuga” del Abuso, -de la cual HAP fue un planificador junto con Zabalza- justamente (¿…?), por esas “aflojes”, se los dejó “adentro”: verbigracia “el perro” Ubillos, verbigracia (también?) Mejías Collazo.

Estamos convencidos de que a esta altura del partido, jugando todos los descuentos, lo mejor que podemos hacer para las generaciones futuras, es dejarles el legado de lo-que-no-debe-hacerse.

 Es –estoy convencido- el mejor homenaje a todos los que murieron, cayeron, fueron torturados, mutilados, violados y fusilados y, la mejor reivindicación de la gesta colectiva de los tupamaros.

c.e.r.
postaporteñ@ 1617 - 2016-06-10 













      Cuando un facho y un milico
"resisten con aguante" 

      

Un canalla y un represor

ERNESTO TENEMBAUM
Periodista


Esta será una mala semana para las personas que, en estos años, adhirieron al kirchnerismo principalmente por su política de derechos humanos. La culpa de que eso suceda se debe a dos personajes centrales del período político que terminó el 10 de diciembre: un canalla y un represor.

El canalla es Guillermo Moreno, quien el domingo 5/6, sostuvo que el gobierno de Mauricio Macri era peor que la dictadura militar.
"Videla tiraba a nuestros compañeros al mar pero no le quitó la comida a los argentinos", dijo Moreno. El represor es su socio comercial, el general retirado Augusto César Milani, a quien finalmente se le acerca el momento de rendir cuentas ante la Justicia, luego de haber sido protegido por el gobierno anterior pese a los sólidos indicios que existían sobre su participación personal en la desaparición de personas. Mientras el gobierno macrista encalla su propio barco en medio de contradicciones de todo tipo, el kirchnerismo no deja de mostrar a cada paso su peor rostro, para lo cual no necesitó nunca ayuda de sus enemigos mediáticos: hay algunas cosas, como se ve, para las que se bastan solitos

La frase de Moreno es brutal por dónde se la mire y un cruel desafío para el mundo de artistas, periodistas, intelectuales y líderes de derechos humanos del kirchnerismo. 
Basta imaginar cómo reaccionarían si un referente macrista dijera que Videla asesinó gente pero no robó tanto como Cristina. Ni siquiera Jaime Durán Barba, cuando dijo que Hitler era un personaje fascinante, llegó a tanto. En estas lides, Darío Lopérfdo ni siquiera califica. No solo es la versión más espantosa del "roban, pero hacen", transformada aquí en "asesinaban pero daban de comer". Además, refleja una ignorancia pasmosa por parte de alguien que tuvo un rol clave en la conducción económica del país: los indicadores sociales de la dictadura fueron catastróficos. 
La Argentina nunca se recuperó de los niveles de pobreza alcanzados en ese período, y todavía sigue sufriendo las consecuencias de un cambio estructural tremendo en su estructura productiva y en su nivel de endeudamiento. Es muy llamativa la absolución implícita de Moreno a la política de José Alfredo Martínez de Hoz

Pero hay en esa frase una falsedad peor.
No hay ninguna evidencia de que Moreno hubiera participado de la resistencia a la dictadura militar ni del largo derrotero para que los jefes de la dictadura fueran juzgados por la democracia. 
Cuando dice "Videla tiraba al mar a nuestros compañeros", Moreno se apropia de una historia que no es la suya. Quien mejor lo resumió fue Mariana Slemenson, hermana de un desaparecido: "Moreno, vos no sos compañero de los que tiraban al mar", escribió en las redes sociales.

La primera reacción, hasta el cierre de esta edición, ha sido vergonzante. Las personalidades más agresivas del kirchnerismo en las redes sociales han hecho silencio, esperando que pase el mal trago. 
Los sitios más activos en la denuncia de cualquier declaración vidriosa sobre la dictadura diarioregistrado.com, por ejemplo no reprodujeron la noticia. Lo mismo sucedió en la edición del lunes y en el portal de Página 12, durante todo el día. 
Los referentes de los organismos de derechos humanos y las habitualmente combativas organizaciones de hijos de desaparecidos no consideraron que debían emitir ninguna declaración, como tampoco lo hicieron las organizaciones culturales que han promovido durante meses el abucheo a Darío Lopérfido.

Como se sabe, hasta fines del 2013, Moreno fue uno de los hombres más importantes del gobierno de Néstor y Cristina Kirchner. En enero de 2007, encabezó la intervención al INDEC que terminó generando papelones inolvidables de ministros cuando, simplemente, se les preguntaba cual era el nivel de la inflación o qué cantidad de pobres había en la Argentina. 
De esa locura, surgió una política antiinflacionaria errónea y negadora que generó infinitos problemas a su Gobierno y al país. 
En marzo de 2010, produjo uno de los hechos de mayor simbología fascista desde 1983: envió barras bravas a romper la presentación de un libro porque trataba, justamente, sobre el INDEC.

A la distancia, resulta muy curiosa la tolerancia de tantos intelectuales al ataque a sillazo limpio contra un libro. Los barras bravas fueron identificados con nombres, apellidos, y números de legajo, pese a lo cual no fueron despedidos. Moreno fue ratificado, una y otra vez, en su puesto, por la presidenta y aplaudido en los actos proselitistas por la juventud K. Retrospectivamente, resulta inverosímil que semejante personaje haya tenido tanto poder. Escuchar sus talentosos stand ups televisivos es muy clarificador sobre algunas de las razones por las que Mauricio Macri llegó al poder.

La notable frase de Moreno llega en un mal momento para su socio, Augusto César Milani. La semana pasada, la Cámara Federal de Tucumán tomó tres decisiones que lo perjudican. Por un lado, anuló la falta de mérito dispuesta por el juez de primera instancia, y le ordenó que convocara a Milani a declaración indagatoria. Además, repuso al fiscal general Gustavo Gómez, que había sido el impulsor de todas las causas de lesa humanidad sobre lo ocurrido en la golpeada Tucumán de Antonio Domingo Bussi, durante la dictadura, pero fue apartado apenas se empezó a interesar por las denuncias contra Milani. 
Finalmente, resolvió que llegue a juicio oral el capitán retirado Esteban Sanguinetti, por la misma razón por la cual Milani había sido protegido. Sanguinetti era el otro responsable de la situación del soldado Agapito Ledo, el asistente de Milani que desapareci&oac ute; durante la dictadura. 
En aquel momento, Milani firmó un sumario donde acusaba a Ledo de haber desertado. Si Sanguinetti está preso desde hace años, hay una sola explicación por la que Milani está libre: la protección de Cristina Fernández.

Estas noticias no merecieron lugares destacados en la prensa que siempre se los da a las causas por violaciones a los derechos humanos ocurridos durante la dictadura.

El derrotero del caso Milani es un caso lacerante para los sectores más idealistas y ciegos del kirchnerismo. Cuando fue designado como jefe del Ejército, el Centro de Estudios Legales y Sociales no difundió las denuncias que existían sobre su pasado: quien sí lo hizo fue Jorge Lanata en Periodismo Para Todos. Al conocerse los hechos, el CELS recomendó que Milani no siguiera en su puesto, pero Cristina no escuchó el consejo.
 Los organismos de derechos humanos más cercanos a la Rosada explicaron que no podrían expedirse hasta que no hubiera sentencia judicial, posición que contradecía la historia del movimiento, que hasta allí siempre había reclamado juicio y castigo a personas que no habían sido procesadas. 
Luego de haber sido desde siempre la referente de las Madres de Plaza de Mayo en La Rioja, la mamá del soldado Ledo fue marginada: Hebe de Bonafini nunca más le atendió el teléfono y terminaría abrazada con Milani en la tapa de la revista de Madres de Plaza de Mayo. La abogada de la familia Ledo fue despedida del AFSCA, por Martín Sabatella, quien argumentó en un cínico comunicado que era una haragana. 

El ministro de Defensa, Agustín Rossi, defendió una y otra vez a Milani mientras el Gobierno les otorgaba un inexplicable presupuesto a los militares para que volvieran a hacer inteligencia interna. En su última intervención pública, la ex fiscal Mónica Fein sostuvo que Milani podría estar involucrado en la muerte del fiscal Nisman.

La inminencia de la citación a Milani, y su posible detención, está destinada a reabrir estas heridas. 

En el 2011, las Madres de Plaza de Mayo recordaron el 24 de marzo con un acto en el Mercado Central muy demostrativo del deterioro de la lucha por la memoria histórica. Los oradores principales fueron Guillermo Moreno, Sergio Shoklender, quien llamó a Néstor Kirchner el desaparecido 30.001, y Amado Boudou. 
En actos posteriores, en el móvil de Madres, se subían un juez que ejerció durante la dictadura, un político que le había echado la culpa a los piqueteros de la muerte de Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, y un periodista que había elogiado a los militares durante el mundial 78. 

Es indiscutible que el kirchnerismo impulsó los juicios a los militares. Pero, mezclado con eso, construyó una teoría según la cual quien fuera kirchnerista era perdonado p or cualquier delito, y quien fuera crítico era castigado aun cuando hubiera denunciado a la dictadura.

Así, Milani pasaba a ser un combatiente y Magdalena Ruiz Guiñazú una colaboracionista, cuando las cosas habían ocurrido de manera exactamente inversa. Bonafini viajó hace unos días a Roma donde visitó a Jorge Bergoglio, otra personalidad a la que denunciaban por haber entregado sacerdotes a Massera y absolvieron luego de que ascendiera de obispo a Papa.

El kirchnerismo militante se envalentona en estos días ante los diversos dislates de la administración macrista. 
Difícil que lo entiendan a esta altura pero, tal vez, las dos historias, la del canalla y el represor, les ayuden a entender por qué el macrismo llegó al poder y celebra cada una de sus apariciones, y por qué, tal vez, el año pasado hayan perdido algo más trascendente e irreparable que una elección.

 

http://www.cronista.com/columnistas/Un-
canalla-y-un-represor-20160607-0027.html



envióFacundo
- postaporteñ@ 1617 - 2016-06-10










      Uruguay : HOY HABLEMOS DE UNA NUEVA CONSTITUCÍON (7)


"todo debe esperarse de la energía de los orientales y de su denuedo por el sostén de la libertad"
 
"Con esta propuesta sólo pretendemos abrir un debate, que nuestro pueblo oriental se debe y que siempre se le ha negado, porque los cambios profundos, radicales sólo pueden surgir de un pueblo cívicamente consciente de sus derechos y obligaciones"
 

Propuesta

REFORMA DEL ESTADO

Antes de hablar de REFORMA DEL ESTADO, debemos pensar hacia qué País propendemos y para ello definir:

-         Su economía;
-         Su estilo de vida;
-         Tipo de política;
-         Tipo de cultura

Como ciudadanos políticos estamos convencidos que urge un cambio de economía, un estilo de vida y una sociedad diferente, otro tipo de política y otro tipo de cultura, que no debe estar basada en el consumismo.
En primer lugar deseamos POLÍTICOS SIN ATADURAS a ningún poder nacional ni extranjero.

Un cambio radical en el comportamiento de los Partidos Políticos. Son instrumentos de la democracia y no dueños de las decisiones políticas.
Repensar seriamente la independencia de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Esto implica revisar nuestra Constitución de origen oligárquica.

En lo concreto y hasta que los ciudadanos den sus opiniones, proponemos:

1) El Poder Legislativo constará de un Parlamento Unicameral y estará integrado por 33 diputados y cada uno de ellos contará solamente con un suplente.
El senado tiene una vieja historia, como organismo de cuño aristocrático u oligárquico que obligaba a pasar a todas las iniciativas resueltas por los diputados del pueblo a través del control del senado. El senado no es necesario. Su supresión permitiría un ahorro de fondos que implican, su funcionamiento y la reducción de tiempo en el trámite de las leyes. El cambio llevaría a tener una Asamblea General de Representantes del Pueblo como Poder Legislativo

2) El Poder Ejecutivo se integrará con un Primer Ministro (en vez del cargo de presidente creado para sustituir al caudillismo reinante) y los 4 titulares de los ministerios de Hacienda; de Producción y Comercio; de Obras Públicas y Defensa; y de la Comunidad.

3) El Poder Judicial. Sobre el poder judicial, como legos en materia, no opinamos, dada su complejidad, aunque somos conscientes que también él debe cambiar. Este tema queda en manos de los especialistas en materia, pero estamos de acuerdo con el doctor Sarthou en sus aspectos esenciales, que señalamos a continuación: “Si bien los jueces actúan con independencia, el régimen de designación conspira contra esa base esencial de la imparcialidad y objetividad en el funcionamiento del Poder Judicial. Los miembros de la Suprema Corte que deberían ser colectivos, hoy son designados por un órgano político como lo es el Asamblea General… Deberían, por lo tanto suprimirse la intervención de los órganos políticos en la designación o venia y ascenso. El Poder Judicial tendría que tener autonomía”

4) El País será dividido  en 4 Zonas para su administración, Norte, Centro, Sur y Metropolitano de acuerdo a su producción: industrial, ganadera, agraria, pecuaria, lechera, vitivinicultura y granjera, eliminando la división departamental actual que fue creada a lo largo de los años a instancias y conveniencias políticas. Serán creadas Juntas Regionales que funcionarán como los Consejos Departamentales conservando el número de integrantes (que hoy rige para cada Departamento) y que éstos cargos sean remunerados. Estas Juntas Regionales serán divididas en Distritos de acuerdo a la cantidad de pobladores, generando normas a través de mecanismos legislativos, donde se pueda fiscalizar y revocar mediante consulta popular, las acciones que deriven de la función de la Junta Regional. De esta forma se evitan muchos cargos partidarios, que a su vez adoptan gerencias y secreta rías con suculentos sueldos. Quedarían en funciones todos los trabajadores que se desempeñen en labores específicas y no como empleados burócratas

5) La convocatoria a un Plebiscito Revocatorio a la mitad del período de gobierno, para confirmar o remover a quienes en su rol de Representante Nacional, tanto parlamentario como ministerial, más el municipal no hayan cumplido con las metas programáticas elaboradas con la ciudadanía

6) La convocatoria a Plebiscito para convalidar la Deuda Externa dentro de los dieciocho meses del nuevo período de gobierno. En el mismo acto plebiscitar los contratos con las empresas multinacionales, las extranjeras, y las llevadas a cabo mediante el Proyecto de Inversiones.

b.- La Asamblea General Constituyente deberá tener en cuenta además:
- Convertir las Embajadas -hoy con un costo muy alto de mantenimiento- en Agencias de Comercio;

- Para los sueldos y para las retribuciones de la Seguridad Social, se tendrá como referencia la canasta básica oficial para un Sueldo Básico Nacional, debiendo llegar al escalafón máximo, en cada rama de actividad, con el doble del básico y sólo en caso de técnicos universitarios que ocupen cargos públicos podrá duplicarse con el fin de estimular su trabajo profesional;

- Eliminar el fuero parlamentario a fin de poder controlar la corrupción;

- Que se revean las normas legales para dar prioridad a la industria nacional, y poner coto a la extranjerización de las tierras;

- Legislar revisando el funcionamiento de los medios de comunicación, donde tengan prioridad los programas nacionales;

- Fomentar la consulta y la participación de la ciudadanía en actos plebiscitarios rebajando el mínimo necesario para la convocatoria a un 5% de la población inscripta en el Registro Cívico Nacional;

- Legislar para importar mercaderías o bienes que el país pueda producir;

- Tener en cuenta los Principios Artiguistas.


Nota: esta propuesta demanda revisar todo el articulado de la Constitución actual.

Entendemos que a nivel partidario y sindical se defiendan los derechos, pero una reforma del Estado nunca será posible si no tomamos al toro por las guampas



puntoApunto
postaporteñ@ 1617 - 2016-06-10 






      Proyecto "El Holocausto", estrategia sionista



Luis E. Sabini Fernández


http://revistafuturos.noblogs.org/



No deja de ser atrozmente penoso que desde una sociedad en que la policía, el ejército y hasta parte de la población ejecuta en la calle a jóvenes bajo sospecha; a quienes se demoran en cumplir una indicación o a jóvenes iracundas armadas de tijeras y en ropas talares que hace altamente improbable que resulten un peligro mortal; en que oficiales de seguridad sean capaces de rematar en el suelo a heridos (presuntos atacantes); en que allanan sistemáticamente  en la noche hogares en donde se detiene a niños de diez o doce años sospechados de haber tirado piedras a los soldados  ?nos referimos a la sociedad israelí, al Estado de Israel?, que desde tal sociedad, abonando esas conductas se irradie el llamado Proyecto Shoá o El Holocausto, que plantea “contribuir a una sociedad más justa y tolerante.”

El hecho, atrozmente contradictorio, tiene su explicación.
Dime de qué te jactas y te diré de lo que careces.” Es la vieja y archisabida exaltación de lo que no se practica, y que por eso mismo, tanto se invoca.  La mención al “holocausto” es coartada precisamente para que no haya opción para con los palestinos.

Es que Israel, basándose en criterios pretendidamente étnicos (“del pueblo judío”), procurando definirse como una sociedad forjada sobre la presunta cesión de tierras que un dios le habría provisto en exclusividad a un pueblo (a su pueblo) no se basa, ni le interesa en tipo alguno de universalidad.
 Las universalidades son violadas más o menos sistemáticamente en todos los estados que se pretenden tales; democráticos, socialistas, católicos. Pero donde la raíz, universalista, presenta la posibilidad siquiera remota de diálogo. Pero con una sociedad tribual, donde el fundamento está en el sí mismo de la etnia, del pueblo, de la grey… no hay diálogo, no hay necesidad de tal. No hay cómo com-binar, com-unicarse, tener com-pañía. Un connotado judío, sionista, Avraham Burg 1/  en su momento jerarca en e l Estado de Israel, ya veterano, reconocía con enorme tristeza que la sociedad israelí carecía de compasión, precisamente. Com-pasión, sufrir junto con “el otro”.

Es esa “marca de nacimiento”  de la tesis sionista (proyecto Israel) lo que crea más que una dificultad, un abismo infranqueable. 
 Advertido por muchos judíos y por muchos no judíos (y aprovechado también por antisemitas  para hacer fructificar sus odios, también tan particulares y como tales, tan injustos).
A medida que el proceso de la formación y el ensanche del Estado de Israel ha ido acentuando sus rasgos –desmantelamiento de un milenio de vida social en el territorio que definieran como “el propio”? el atropello a “los obstáculos” para “El Gran Israel” se ha ido acentuando. Podríamos decir, tenemos que decir que el sionismo ha ido brutalizando lo que ya fuera su ominoso comportamiento (por momentos, escalofriante, como el asesinato frío de un judío partidario del diálogo con árabes) en la década del ’20 y más adelante. Si uno observa el tratamiento dispensado a la Franja de Gaza, “una basurita en el ojo sionista”, con las invasiones de 2006, 2009, 2012, 2014, puede uno verificar que esa brutalización es cada vez mayor.

Ha sido precisamente a causa de ese proceso, que la craneoteca sionista decide en 2010, iniciar una contraofensiva cultural, intelectual, mediante “cuadernos de combate ideológico” como el “Diccionario del Proyecto Global” y varios otros emprendimientos por el mismo tenor.

Algunos de estos proyectos son de carácter general; otros son más particularizados. Se pueden observar algunos dedicados  a nuestra región.
Marcelo Marchese acaba de hacer un punteo de las modificaciones sufridas en libros de textos curriculares para los alumnos de nuestro país, que es al respecto claramente ilustrativa /2

En el 2000, el politólogo estadounidense judío Norman Finkelstein, con todos sus parientes masacrados por el nazismo (salvo sus progenitores) pública  The Holocaust Industry, que está traducido al castellano desde 2008, La industria del holocausto (se lo puede bajar desde internet, “La editorial virtual”).
Allí Finkelstein procura responder por qué la persecución que los nazis emprenden contra los judíos a lo largo de la segunda mitad de la década del ’30 y que rematan con la muerte “industrializada” de judíos (y otras minorías) entre 1941 y 1945 es un episodio poco estudiado, prácticamente ignorado en los circuitos mediáticos durante las décadas siguientes,  hasta que en 1967 aflora como elemento clave en la defensa… no ya de los judíos sino de Israel /3
Finkelstein define  este giro y define lo que se presenta como “El Holocausto” (con mayúscula) “como representación ideológica del holocausto nazi […con]una conexión, si bien tenue, con la realidad […en] su mayor parte inservible; no constituye un tributo al sufrimiento judío sino al engreimiento judío.”  
Es este culto a sí mismo el que se ha implantado primero en Israel, en sus escuelas primarias /4, y luego ha sido extendido fuera de Israel, hacia sociedades donde existe muy poco conocimiento sobre la problemática palestino-israelí y sobre el trato que la población judía israelí le propina a los natives  de Palestina.

Vale la pena precisar que esta nueva versión de “El Holocausto” tal como la define Finkelstein se presentará impregnada de espectacularidad hollywoodense.
Miembros del “Proyecto Shoá”  en Uruguay (que con mucha sagacidad han esquivado la denominación made in USA de “El Holocausto”, aunque se refieren exactamente a lo mismo) se dedican  a analizar “los derechos humanos, la convivencia y el bullying” tomando las enseñanzas de “El Holocausto”.

El carácter ideológico y estratégico de semejante abordaje  es tan mayúsculo que en Argentina ?donde desde 2014 han encarado el mismo adoctrinamiento? han implantado esta enseñanza hasta entre tobas. Como si los tobas no tuvieran en su propia experiencia (y en la de todos los pueblos originarios del continente) una vivencia suficientemente significativa y dolorosa desde la cual plantearse los temas que se procuran abordar con “El Holocausto”.

Sería como tratar de explicarles a niños charrúas, si hubiesen sobrevivido a la sociedad uruguaya, cómo se extermina a un pueblo, como si ellos no lo hubieran vivido.

Examinar, críticamente, la matanza de judíos a manos de nazis (y también de judíos a manos de zaristas en los pogromos de finales del siglo XIX), y la de maoríes a manos de británicos en Nueva Zelandia, y la de armenios en la “Gran Turquía”, y la de pieles rojas a todo lo ancho de la América del Norte a manos de “piadosos” evangélicos y cuáqueros, y la de guaraníes, kollas, mapuches, charrúas, y la de bantúes, hereros, zulúes y tantas otras etnias en África, sería un buen abordaje para entender el significado de los genocidios, por ejemplo, en la historia humana. Y entre ellos, el frío y sistemático etnocidio que se aproxima cada vez más a un genocidio de palestinos dentro del “Gran Israel”.

Pero la política de tratar de manera exclusiva o principal lo acontecido con judíos a manos de los nazis, y de reservarle a semejante momento de la historia de la humanidad un rango exclusivo, un papel especial, esencial, obedece a una política. Muy precisa: la defensa de cierta especificidad judía que hace que lo vivido por judíos sea algo incomparable con lo vivido y vivible por otros humanos.

Defender una excepcionalidad judía. De la que afortunadamente muchos judíos reniegan. Pienso en Gilad Atzmon, en Ilan Pappé, en los argentinos judíos que han renunciado a ser judíos argentinos y se han desmarcado de la política de DAIA-AMIA en Argentina y de la tutela israelí. Y en tantos otros.

Pienso en judíos como el rabino Yeshayahu Leibovitz que rompiera totalmente con las alas terroristas y supremacistas del sionismo, calificando a sus integrantes de “nazis judíos”.

Pero así como hay judíos que se atreven a romper con el rebaño, hay no-judíos que, con miedo a ser tildados de antisemitas, por ejemplo, se hacen más papistas que el papa, y aceptan las “sugerencias” de los diplomáticos israelíes para encarar este tipo de lavado de cerebro sobre nuestros niños. Que, ciertamente, no pueden defenderse solos.

Uruguay tuvo el dudoso valor de haber promovido la remoción de palestinos de su tierra para entregar esa tierra a un pueblo atrozmente perseguido en Europa, los judíos.

Tras la pesadilla nazi, se podía entender cierta confusión y cierto estremecimiento que hacía que algunos representantes de la ONU optaran por dar tierras ajenas a los judíos. Que no eran, en rigor, “los judíos”, sino los sionistas.  Muchos judíos rechazaron airadamente el invento sionista. En el mismo año 1897 en que se reúne el primer congreso mundial sionista, se reúnen judíos internacionalistas y fundan el BUND.

Marek Edelman, uno de los sublevados del Gueto de Varsovia, bundista y sobreviviente, y otra vez sublevado en la misma Varsovia al año siguiente, y otra vez sobreviviente, en 1945 se dedica a terminar sus estudios de medicina en su Polonia natal. A fines de los ’40 es invitado  a Israel. Podría haber ido como héroe y se niega rotundamente. Porque él era judío, no sionista. Y se negó a participar de esa empresa, carente de la universalidad de que hablamos un poco antes.

Edelman murió sin ser reconocido en el mundillo sionista, claro está.  Ya veterano participó de Solidarinosc en Polonia, en los ’80 contra la dictadura comunista y ya muy viejo, se ofreció para “ayudar” por su experiencia en lucha subterránea (literalmente, en las cloacas) en Sarajevo, junto a quienes resistían los exclusivismos étnicos (y su racismo implícito) cuando la terrible lucha fratricida en Bosnia en los ’90, que diezmó, literalmente, a los bosnios musulmanes.

Edelman se sentía perteneciendo a la humanidad, sin duda. Y con motivos.
Uruguay en 1948, igual que Guatemala, Perú, Canadá, Australia, fueron prácticamente digitados por EE.UU., el nuevo “Hermano Mayor” de la flamante ONU, para constituir el comité (UNSCOP, United Nations Special Committee for Palestine, Comité Especial de la ONU para Palestina).

Entonces dicho comité, nuestra representación en ella y el propio organismo asambleario de la ONU, no supo discernir las voces discordantes (dentro de la misma UNSCOP) de Irán, que recientemente devenido estado soberano no estaba digitado por bloque alguno, de India donde el partido dirigido por el recién asesinado Mahatma Gandhi tenía una clara posición de defensa de los habitantes palestinos que estaban sufriendo una invasión (tanto cultural como militar) y de Yugoeslavia, una nación que surgió de la segunda guerra mundial con peso propio, comunista pero no dependiente del eje soviético.

Tampoco las del mundo árabe, significativamente sin representación alguna en la UNSCOP.

Sería hora que la sociedad uruguaya reevaluara su participación en los episodios fundacionales de Israel, en 1948.

Han pasado ya muchas décadas, y con el empeoramiento de las condiciones de vida, cada vez más cercana a la muerte, de los palestinos que sobreviven en las tierras ansiadas por el sionismo, entendemos que lo realmente democrático y respetuoso es oír las voces de los aplastados, no sólo atender a “la voz del amo” aunque se proclame a sí mismo la víctima.

El proyecto Shoá, en cambio, es más de lo mismo; “defensa de Occidente”, aceptación gozosa del par EE.UU.-Israel y la geopolítica consiguiente, que es, precisamente la que está desmantelando cada vez más países y el planeta en general con su hybris tecnocrática


CODA

Desde hace muchos años he pensado siempre que quienes no éramos ni palestinos ni sionistas, ni musulmanes ni judíos, y nos “inmiscuíamos” en la penosa y atroz cuestión palestina, éramos algo así como quienes brindábamos el mejor aporte, los mejor ubicados para juzgar la cuestión, sin intereses particulares ni presupuestos sesgados.

 Tal vez en esta convicción juegue la tendencia ?al parecer tan propia de los humanos?  de sentirse siempre, inconscientemente, en el mejor lugar, en el más importante, en el decisivo…
Sin embargo, el reiterado contacto con judíos me ha hecho repensar tal  asignación de papeles.

Entiendo que son los judíos que no pueden tolerar el papel del Estado de Israel, su etnocidio militante, el creciente desprecio por la vida humana no judía, el supremacismo que ha ido destilando cada día más claramente el panorama político de Palestina, a quienes les cabe el mayor mérito, o el mayor reconocimiento por su actitud y su amor a lo justo.

Podría corresponder similar reconocimiento a los palestinos que no aceptan un islamismo retrógrado ni el archiconocido “antisemitismo  vulgar”. Pero con ser tal actitud también muy respetable, lo que engrandece a los judíos que han aprendido a rechazar el esquema de poder vigente es que se trata del máximo poder planetario, el que se articula en los grandes centros de poder mundial.


1 “El sionismo está muerto”, Le Monde, París, 11/9/2003. 
Hay traducción al castellano, futuros, no 8, Río de la Plata, invierno 2005.

2  “De cómo el sionismo transformó un manual de enseñanza secundaria en Uruguay”, www.rebelion.org, 18/5/2016.

3  Al respecto es ilustrativo registrar la cantidad de producciones documentarias que década a década se hicieron en todo el mundo sobre este atroz tema: 10 en los ’40; 1 en los ’50; 8 en los ’60; 4 en los ’70; 26 en los ’80; 70 en los ’90; 49 en la primera década del s XXI (fte.; wikipedia). 10, 1, 8, 4 y luego, 26, 70, 49… hay diferencia. 

4  Jonathan Cook ha analizado este proceso en su blog.





LSabini - postaporteñ@ 1617 - 2016-06-10







      A 4 años de la Masacre de Curuguaty, no los olvidamos, luchamos con ustedes


Es tiempo de libertad

Paraguay, 7 de Junio de 2016


Se cumplen 4 años del infame episodio conocido como la Masacre de Curuguaty, ocurrido el 15 de junio de 2012 en el departamento de Canindeyú, Paraguay. Una vez más, nos juntamos a recordar ese nesfasto día en el que las mafias sellaron con sangre el destino del país. La Masacre de Curuguaty demuestra el poder y los pocos escrúpulos que tiene la oligarquía terrateniente, que actúa en articulación con las transnacionales y ocupa todos los poderes del
Estado Paraguayo

Aquel triste día en pocos minutos se terminó con la vida de 17 personas para continuar con la escandalosa acumulación fraudulenta que tiene como protagonistas a los sectores dominantes, y también para desalojar del gobierno a un presidente electo democráticamente.

Lamentablemente, esta Masacre es solo un episodio reciente en la triste historia de desposesión del campesinado paraguayo. Pero esta vez, estamos decididos a no caer en la desmemoria y eso nos convoca a juntarnos. Jamás permitiremos el olvido como tampoco dejaremos de buscar justicia para las víctimas y libertad para los inocentes perseguidos.

El juicio absurdo que está culminando en Paraguay, pretende castigar a los campesinos por buscar tierra para vivir y así garantizar que los sojeros puedan continuar saqueando al pueblo.

Los campesinos son inocentes y no existe elemento alguno para sostener una acusación, un juicio, menos aún una condena en el marco de un proceso plagado de irregularidades, que demuestra la manifiesta parcialidad de los funcionarios de la justicia.

Una vez más reclamamos la libertad de los campesinos y campesinas, presos políticos por la Masacre de Curuguaty. 
Un país que pretenda ser considerado democrático, no puede tener presos políticos y es por ello que exigimos la inmediata libertad de los procesados. Asimismo, exigimos una verdadera investigación seria que considere todas las pruebas y condene a los verdaderos culpables por la muerte de las 17 personas y los cientos de damnificados por este lamentable hecho.

Agradecemos el acompañamiento y la solidaridad de todas las personas de diferentes lugares del mundo que en estos años han apoyado la causa, a la vez que llamamos a redoblar los esfuerzos en estos minutos decisivos en los que se intenta ocultar la verdad y condenar a quienes en realidad son víctimas.

Al mismo tiempo, levantamos la voz para comunicar a todas las familias de Marina Kue, que

“No los olvidamos y luchamos con ustedes”. 
Es tiempo de libertad.
Marina Kue, pueblo mba’e.

Esta es nuestra palabra:

Movimiento 138. Colectivo de resistencia cultural (Paraguay/Argentina).

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Comisión Prensa y Comunicación
UAC Unión de Asambleas Ciudadanas

- postaporteñ@ 1617 - 2016-06-10 








      Brasil /Lucha contra la derecha exige claridad de la situación y del proyecto


Hamilton Octavio de Souza *

Correio da Cidadania, 3-6-2016

Traducción de Ernesto Herrera – Correspondencia de Prensa


Nadie duda de que la crisis brasilera envuelva aspectos políticos, económicos, éticos y sociales de enorme complejidad, los cuales confunden la real identificación de buena parte de sus orígenes, consecuencias y posibles desdoblamientos y superaciones. Vivimos una coyuntura embarullada de tal manera que en el corre-corre de los acontecimientos muchas veces tomamos decisiones y miramos blancos de menor relevancia para el enfrentamiento de la crisis. Somos tragados por hechos producidos en el Palacio del Planalto, en el Congreso Nacional, en Supremo Tribunal Federal, en la Operación Lava Jato, en los medios y redes sociales. Gastamos energía superflua y corremos el riesgo de llegar a ningún lugar, reproducir lo que está ahí y no cambiar la situación actual.
Las manifestaciones contra el gobierno (interino, provisorio, transitorio) de Michel Temer, que ocurren desde el inicio de mayo en varias partes del país, expresan motivaciones y objetivos diferentes. Los sectores influenciados por el PT y PCdoB, derrotados en el Congreso Nacional y apartados temporalmente del gobierno debido al proceso de impeachment de la presidente Dilma Rousseff, están en la calles para denunciar el “golpe” e intentar revertir el juzgamiento de la presidente en el Senado.  
En caso de una nueva derrota institucional, deben asumir de forma rutinaria el papel de oposición al gobierno federal y prepararse para las elecciones municipales de este año y, principalmente, para las elecciones de 2018. Están en ese bloque las organizaciones identificadas con el lulismo, como el PT, PCdoB, Frente Brasil Popular, CUT, CMP, MST y UNE.

Buena parte de la cúpula de esos partidos y movimientos considera difícil el retorno de la presidente Dilma Rousseff al gobierno, ya que depende de una fuerte guiñada de posición en el Senado y, más que eso, de la construcción de un nuevo bloque de apoyo parlamentario y de la reconquista de la confianza junto al empresariado y demás actores políticos y económicos en las instituciones del Estado y en la sociedad civil. 
Incluso si el desempeño del gobierno Temer sea muy malo, las fuerzas que actuaron en el apartamiento de Dilma, inclusive la gran prensa empresarial-burguesa, tiende a defender el gobierno de Temer y confirmar la caída definitiva de Dilma.

Engrosan las manifestaciones contra el gobierno Temer amplios sectores de la sociedad críticos al gobierno Dilma y al PT, especialmente la juventud, estudiantes, intelectuales y funcionarios públicos, que en el proceso del impeachment fueron sensibilizados por la denuncia del “golpe” y por la defensa genérica de la democracia - del llamado Estado Democrático de Derecho, que no es otra cosa que la base jurídica del sistema fundamentado en el liberalismo político y en la economía capitalista. 
Están en las calles porque no quieren retrocesos en los derechos, conquistas sociales y en las libertades democráticas. No quieren a Temer, pero tampoco se identifican con la presidenta apartada, con el PT y con el lulismo. Apenas no quieren al conservadurismo y a la derecha en el gobierno federal.

Lucha de masas


Se embarcan también en esa movida del “Fuera Temer”, las fuerzas de izquierda que no están empeñadas en “Quédate Dilma” o “Vuelve Dilma”, pero que refuerzan esa lucha por la democracia en la expectativa de que el movimiento de masas pueda crecer contra la derecha, inclusive después de la eventual destitución o renuncia de Dilma Rousseff, de manera de fortalecer la lucha general de la clase trabajadora.
 Están en ese grupo principalmente los integrantes o corrientes más combativas del PSOL, PCB, otras organizaciones socialistas, movimientos populares distanciados del lulismo y militantes independientes de izquierda. El PSTU y sus aliados tienen posición propia contra todas las direcciones de los partidos del orden dominante, inclusive contra el gobierno Temer.
Parte de esas fuerzas defiende la realización de elecciones generales en 2016, en la tentativa de mudar la composición del Congreso Nacional y de tener algún líder nuevo y promisorio en la Presidencia de la República. 
Otra parte apuesta en el avance de la lucha de masas hasta la convocatoria de una Asamblea Nacional Constituyente, que pueda cambiar las leyes, el sistema político-partidario y promover una renovación de los liderazgos políticos.
Todas esas fuerzas tienen noción clara de que están en lucha contra la derecha, saben que el gobierno Temer representa a los sectores conservadores y al bloque afinado con el neoliberalismo, con la elites y las oligarquías del capital nacional y extranjero. 
Por eso mismo precisan tener claridad sobre qué hacer más allá del “Fuera Temer”, cuál el proyecto a ser defendido por las oposiciones de izquierda ahora y en el futuro.


Elecciones de 2018


El PT no esconde que por detrás de la denuncia del “golpe” y de la campaña del “Fuera Temer”, tiene una preocupación estratégica relativa por el futuro del partido en las elecciones de 2018. Embalado en el marketing de la lucha por “democracia” y el “rescate de la legitimidad del gobierno”, la campaña electoral de 2018 puede significar, para los petistas, la recuperación del espacio perdido en el fracaso del gobierno Dilma, en los procesos de corrupción de la Operación Lava Jato y en los casos de involucramiento espurio del mayor líder del partido (Lula) con las empresas constructoras OAS, Odebrecht y Camargo Corrêa.

La denuncia del “golpe” cumple varias funciones. La primera de ellas procura atribuir al proceso de impeachment una connotación de acción ilegitima y antidemocrática de la oposición de derecha, de tal manera que el foco sea colocado en los adversarios y no en el propio gobierno del PT, ni en la necesidad de autocrítica sobre los errores de la gestión y sobre los equívocos políticos y éticos practicados en los 13 años de lulismo. La denuncia de “golpe” sirve para lanzar una cortina de humo en el fracaso del PT en el gobierno y omitir una autocrítica sobre lo que el partido debe a los trabajadores y al pueblo brasilero.

Una cuestión que precisa se colocada ahora es la siguiente: el pueblo brasilero creyó en el proyecto del PT en las elecciones de 2002, 2006, 2010 y 2014 ¿pero por qué ese proyecto naufragó y dejó el país en el caos económico, con millones de desempleados, con la educación y la salud arruinadas, con programas sociales estancados y toda la máquina pública reventada?

 ¿Por qué la derecha aliada al PT ganó fuerza en los gobiernos del PT y terminó por abatir al propio PT, causando graves daños para el pueblo brasilero?

Si el PT no hace una amplia y profunda autocrítica de sus errores y equívocos, la lucha de resistencia al “golpe”, por la democracia, contra el gobierno de la derecha, tiende a no impulsar el necesario aprendizaje político y apenas favorece el retorno del lulismo en 2018, bajo el mismo molde del período 2003 a 2016, que dejó el país en la actual situación. La clase trabajadora tiene el derecho de saber cuál es la política de alianzas y cuál es el proyecto de los que luchan contra el gobierno Temer; si siguen el mismo esquema de conciliación de clases que llevó a Lula y Dilma al gobierno federal, o si defienden ahora una propuesta diferente. 

¿Al final, el lulismo continúa apostando en la conciliación con el capital y en el “presidencialismo de coalición” con los partidos tradicionales de la derecha?

Proyecto revolucionario


Es esencial que las fuerzas de izquierda que participan de las manifestaciones del  “Fuera Temer”, “Fuera Cunha”, “Fuera Jucá”, “Fuera Renan”, tengan un proyecto político más avanzado de transformación social de aquel que fue aplicado por el lulismo y que fue fragorosamente derrotado por la derecha. Vale recordar que el programa adoptado por el actual gobierno Temer, que enfrenta resistencia en la sociedad, es igual al programa que Dilma intentó aplicar en 2015 y fue ampliamente rechazado por el pueblo.

Está claro que no basta derribar o prohibir políticos marcados por la corrupción y/o la incompetencia y/o por la falta de compromiso con el pueblo brasilero. Tampoco basta enfocar la crítica y el ataque a uno u otro partido político, pues, en general, todos han reproducido los mismos vicios. 
Tentar hacer una reforma política en la coyuntura es correr el riesgo de entregarle oro a otro bandido, en la medida en que los políticos y los partidos que dominan el Congreso Nacional, los gobiernos estaduales, las asambleas legislativas, las alcaldías y las cámaras municipales están interesados en apenas mantener sus privilegios y sus esquemas de poder. Cualquier cambio real, profundo y verdadero precisaría primeramente dinamitar el actual sistema político-partidario-electoral, precisaría contar con la fuerza del pueblo, la rebelión popular, la organización y la lucha de la clase traba jadora de abajo hacia arriba.

.No basta cambiar gobernantes de los más variados partidos si todos están aprisionados al modelo económico dominante. La lucha de la izquierda, de los trabajadores, de la juventud y del pueblo brasilero debe estar centrada más allá del “Fuera Temer”, “Fuera Dilma”, “Fuera Lula”, “Fuera Cunha”, “Fuera Renan”, “Fuera X”, “Fuera Y”.

La izquierda precisa tener proyecto político para la transformación económica y social de Brasil con objetivos innegociables, entre los cuales la efectiva reducción de las desigualdades, el acceso inmediato a los derechos fundamentales, el fortalecimiento del poder popular, la concreta mejoría de todos los servicios públicos, la profundización real de la democracia y la abolición de todas las formas de explotación de los trabajadores.

El compromiso mayor de la izquierda debe ser con la construcción de una sociedad justa, igualitaria, libre, democrática y soberana. 
Los militantes de la izquierda socialista que se empeñan en esa lucha precisan tener la osadía de proponer acciones verdaderamente revolucionarias. Precisamos librarnos de los proyectos del pasado, que prometen mucho y nada hacen.
No debemos ser masa de maniobra de más de lo mismo.
 Es preciso cambiar de verdad, tener claro que el cambio que reclama el pueblo brasilero se llama revolución. Ese es el proyecto, nada más que eso.

* Hamilton Octavio de Souza es periodista e historiador




- postaporteñ@ 1617 - 2016-06-10 













      Trabajo "incorporado" y trabajo "objetivado"




Rolando Astarita [Blog]


Una cuestión que atraviesa muchas discusiones sobre la teoría del valor de Marx, es la idea de que el valor es tiempo de trabajo incorporado, o gastado, en la producción de un bien. En particular, es bastante común identificar la noción de “trabajo objetivado”, de Marx, con el “trabajo incorporado” que encontramos en Ricardo o en Sraffa (y los sraffianos). De esta manera desaparece la especificidad de la teoría del valor de Marx, su diferencia esencial con la teoría de Ricardo.

A los efectos de ayudar a clarificar la cuestión, tengamos presente que en los Principios… de Ricardo el valor de los bienes está determinado “por la cantidad de trabajo requerida para obtenerlos” (p. 9); también afirma que “la cantidad de trabajo cristalizada en los bienes determina su valor de cambio” (p. 11). De hecho, el trabajo empleado de forma privada, en esta concepción, determina el valor de la mercancía. Una idea similar la encontramos en Sraffa en el caso hipotético en que no hay beneficio, esto es, en que todo el excedente va al salario. “Cuando hacemos w (salario) = 1, el total de la renta nacional va a parar a salarios y r (tasa de beneficio) es eliminado. (…). 
A este nivel, los valores relativos de las mercancías son proporcionales a sus costes-trabajo, es decir a la cantidad de trabajo que ha ido directa o indirectamente a producirlas” (Producció n… p. 29). O también: “… cuando el salario absorbe todo el producto neto, la mercancía es igual en valor al trabajo que ha sido necesario, directa o indirectamente, para producirla” (p. 124). 
La misma idea es formulada por Pasinetti, al presentar el vector v de los coeficientes de trabajo verticalmente integrados. Este vector, dice Pasinetti, representa “las cantidades de trabajo directa o indirectamente ‘incorporado’ en cada unidad física de las mercancías que constituyen el producto neto del sistema”. Significativamente, agrega que es lo que Marx, “por definición llamaba valores” ((Lecciones… p. 101).

[Aclaración: el vector v es igual a a0 (I – A)-1, donde a0 es el vector de los coeficientes de trabajo directo, y (I – A)-1 es la inversa de Leontief. Cada columna j-ésima de (I – A)-1 representa una serie heterogénea de mercancías 1, 2,… n que es necesario emplear para obtener una unidad física de la mercancía j-ésima. Y cada fila i-ésima de (I – A)-1 representa la cantidad total de mercancía i-ésima necesaria para obtener una unidad final de cada una de las mercancías 1, 2,… n; he alterado levemente la notación de Pasinetti].

Trabajo objetivado en Marx

La formulación de Pasinetti es característica de una lectura en clave ricardiana de la teoría del valor de Marx: el valor es simplemente el trabajo que se ha incorporado a la mercancía. Sin embargo, en Marx la cuestión no es tan simple, porque lo que cuenta como valor es el trabajo objetivado (a veces utiliza el término “coagulado”, “materializado”; y también habla de “gelatina de trabajo”, o “coágulo de trabajo”), que no es solo trabajo empleado de forma privada para producir la mercancía, sino trabajo que ha sido sancionado como tiempo de trabajo socialmente necesario. 
Pero esto ocurre solo a través de la venta de la mercancía. Marx explica la cuestión en varios pasajes de su obra, pero para lo que necesitamos ahora es suficiente con el capítulo 1 del tomo I de El Capital.
Por un lado explica que “[u]n valor de uso o un bien, sólo tiene valor porque en él esta objetivado o materializado trabajo abstractamente humano” (p. 47). 
Pero esta “objetividad” del valor no es física, sino social. Escribe Marx:

“La objetividad de las mercancías en cuanto valores se diferencia de mistress Quickly en que no se sabe por dónde agarrarla. 
En contradicción directa con la objetividad sensorialmente grosera del cuerpo de las mercancías, ni un solo átomo de sustancia natural forma parte de su objetividad en cuanto valores”. Es por eso que la mercancía no puede expresar esta propiedad con su cuerpo natural; esto es, por más que le demos vuelta a la mercancía, “resultará inasequible en cuanto cosa que es valor”. Por lo tanto la objetividad en tanto valor solo podrá aparecer en la relación d
e la mercancía con otra mercancía. Es lo que explica Marx en el siguiente pasaje: 
“Si recordamos, empero, que las mercancías solo poseen objetividad como valores en la medida en que son expresiones de la misma unidad social, del trabajo humano, que su objetividad en cuanto valores, por tanto, es de naturaleza puramente social, se comprenderá de suyo, asimismo, que dicha objetividad como valores solo puede ponerse de manifiesto en la relación social entre diversas mercancías” (p. 58, énfasis añadidos). 
Y pocas páginas más adelante, plantea: “La fuerza de trabajo humano en estado líquido, o el trabajo humano, crea valor, pero no es valor. 
Se convierte en valor al solidificarse, al pasar a la forma objetiva
 Para expresar el valor de la tela como gelatina de trabajo humano, es menester expresarlo en cuanto ‘objetividad’ que, como cosa, sea distinta del lienzo mismo, y a la vez común a él y a otra mercancía” (p. 63; énfasis agregado).
Esto es, si por alguna razón el acto de venta no se puede realizar, el trabajo gastado no se convierte en valor

 O también puede suceder que el trabajo gastado no se convierta en valor equivalente al tiempo de trabajo empleado. 
Por ejemplo, si un productor de tela ha empleado la tecnología y la intensidad imperantes en la rama de tejedores, supongamos 10 horas para producir A cantidad de determinada tela, pero en la rama hubo más producción de la que el mercado puede absorber, y vende la tela en el equivalente a 8 horas de valor, su trabajo privado de 10 horas se habrá convertido en solo 8 horas de valor.
 En otras palabras, se objetivó en 8 horas de valor.
Estamos entonces muy lejos de la interpretación de Pasinetti, o del concepto de valor de Ricardo o Sraffa. 
En la teoría de Marx la objetivación del trabajo como valor ocurre a través de la venta.  Por eso insiste una y otra vez en que los productos adquieren objetividad de valor solo en el intercambio.

 Es por esta razón que el trabajo privado e independiente no puede ser directamente valor. 
Sin movernos del capítulo 1 de El Capital, por ejemplo: “… los trabajos privados no alcanzan realidad como partes del trabajo social en su conjunto, sino por medio de las relaciones que el intercambio establece entre los productos del trabajo y, a través de los mismos, entre los productores” (p. 89; énfasis añadido). 
Luego: 

“Es solo en su intercambio donde los productos del trabajo adquieren una objetividad de valor, socialmente uniforme, separada de su objetividad de uso, sensorialmente diversa”. También por la negativa, cuando explica que el equivalente tiene la peculiaridad (o sea, no sucede con el común de las mercancías) de que el trabajo privado invertido en su producción es directamente social: “… una tercera peculiaridad de la forma equivalente es que el trabajo privado adopta la forma de su contrario, del trabajo bajo la forma directamente social” (p. 72).

La cuestión de fondo en esta concepción de Marx es que en la sociedad productora de mercancías subyace una contradicción fundamental, a saber, que los trabajos se realizan bajo forma privada, pero deben validarse como partes del todo social.
 “Si los objetos de uso se convierten en mercancías, ello se debe únicamente a que son productos de trabajos privados ejercidos independientemente los unos de los otros. 
 El complejo de estos trabajos privados es lo que constituye el trabajo social global. Como los productores no entran en contacto social hasta que intercambian los productos de su trabajo, los atributos específicamente sociales de esos trabajos privados no se manifiestan sino en el marco de dicho intercambio” (p. 89, énfasis añadido). 
La idea de que el trabajo invertido en forma privada es directamente social es de Ricardo, no de Marx.


Bibliografía:

Marx, K. (1999): El Capital, México, Siglo XXI.
Pasinetti, L. (1984): Lecciones de teoría de la producción, México, FCE.
Ricardo, D. (1985): Principios de Economía Política y tributación, México, FCE.
Sraffa, P. (1966): Producción d




rolando - postaporteñ@ 1617 - 2016-06-10 






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